El emporio textil traspasa sus fronteras y apuesta por su presencia en la región.
Los empresarios de Gamarra, el corazón textil de Perú, inician su presencia regional con el apoyo de las oficinas comerciales del Perú en el exterior (OCEX). El sector apunta a los mercados vecinos de Ecuador, Chile, Brasil y Colombia, según confirmó el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo.
La Comisión de Promoción del Perú para la Exportación y el Turismo (PromPerú) y la OCEX Quito en Ecuador presentaron a diez empresas del clúster textil Gamarra en la feria Ecuatextil, realizada en Quito, entre el 21 al 23 de abril. Próximamente, un grupo diferente de empresarios se presentará en Chile de manera virtual en una misión comercial especial de moda en ese país, del 10 al 12 de mayo.
Adicionalmente, se conoció que los próximos lugares de internacionalización para las empresas de Gamarra serán Colombia y Brasil, con sus respectivas ferias textiles y de moda que se realizarán a mediados de este año. Las empresas textiles del emporio llegan a estas nuevas latitudes de la mano de PromPerú y la marca país.
Gamarra, cuenta con más de 40 000 empresas. Antes de la pandemia, generaba en promedio medio millón de puestos de trabajo al año, cifra que se vio disminuida en más del 20% durante 2020 con el cierre definitivo de al menos un 15% del total de los negocios del sector, mientras otro 15% cerró de manera temporal.
Según cifras oficiales del emporio de Gamarra, el sector facturaba antes de la pandemia cerca de 510 millones de soles mensuales (US$ 133 millones), es decir unos 6 100 millones de soles anuales (US$ 1 597 millones).
Durante 2021 el país registró exportaciones textiles por US$ 1 728 millones, un avance del 65 % frente a 2020 cuando se vivió la mayor caída del sector en las ventas internacionales. Para este 2022 y en adelante, la industria textil retoma sus planes de superar la meta de exportar productos por más de US$ 2 200 millones anuales.
El principal destino de las exportaciones textiles de Perú sigue siendo Estados Unidos, sin embargo, dada la situación comercial actual, las dificultades en los envíos, la escasez de materias primas y la inflación, el país mira a sus vecinos y prevé expandir su alcance en la región, mientras conserva y desarrolla sus compradores internacionales.
